Los equipos que trabajaban para restablecer el suministro eléctrico en Puerto Rico lograron que más de la mitad de los clientes volvieran a tener electricidad al día siguiente de un apagón masivo. El apagón, que comenzó el 16 de abril, dejó a 1.4 millones de clientes sin servicio debido a una falla en el sistema de transmisión. Este tipo de incidentes no es raro en Puerto Rico, donde se han experimentado apagones prolongados en el pasado.
La situación fue calificada como inaceptable por la gobernadora Jenniffer González-Colón. Luma Energy, la empresa encargada de la transmisión y distribución de energía en la isla, estimó que el 90% de los clientes recuperarían el servicio entre 48 y 72 horas después del incidente. Para la tarde del 17 de abril, más de 843,800 clientes ya contaban nuevamente con electricidad.
El apagón fue causado por el cierre inesperado de todas las plantas generadoras, según Genera PR, la empresa responsable de la generación de energía en la isla. Este incidente ocurrió en un momento crítico, ya que los puertorriqueños se preparaban para las celebraciones de Pascua, una festividad importante en la región. Como consecuencia, muchas personas tuvieron que adaptarse, cenando a la luz de las velas o comprando hielo para preservar sus alimentos.